La Inmaculada Concepción refiere a que Nuestra Señora fue preservada de la delito del pecado original desde el momento de su concepción. El inicio virginal hace sugerencia a que Jesús fue concebido y nació no de la carne sino del Espíritu Santo. La liturgia, pues —como toda la Revelación— https://matts802ztn9.theobloggers.com/profile